No hay nada más tierno que la imagen de un gatito bebiendo leche en un bol. Cuando el gatito crece algunas personas quieren que la imagen perdure en el tiempo y le siguen ofreciendo el mismo bol de leche. Pero ¿es esto necesario? ¿Deben beber los gatos leche cuando son adultos?
Intolerancia a la lactosa
Todos los mamíferos recién nacidos se alimentan de leche materna. A medida que crecen y empiezan a tomar alimentos sólidos (esto sucede hacia las cuatro semanas de edad, aproximadamente) el interés por la leche materna disminuye. Al mismo tiempo también disminuye la cantidad de lactasa, la enzima encargada de transformar la lactosa de la leche en glucosa para que sea absorbida sin dificultad en el tracto intestinal. Muchas personas también carecen de lactasa por lo que al no poder descomponer la lactosa, la leche no se digiere y produce diarrea y otros trastornos digestivos. Los productos lácteos como el yogur o el queso tienen niveles de lactosa menores que la leche, por lo que son mejor tolerados.
La leche como complemento
Muchos propietarios creen que es imprescindible que el gato se alimente de los nutrientes que aporta la leche; otros, piensan que ofrecer leche a los gatos es un gesto de cariño que debe repetirse cada día. Incluso algunos piensan que deben beber tanta leche como agua.
Pues bien, nada de esto es cierto. De hecho existen algunos conceptos erróneos sobre la leche en la alimentación que vamos a intentar aclarar:
- Si bien posee numerosos nutrientes, nunca se debe utilizar como una fuente complementaria de calcio o proteínas; el exceso de calcio puede provocar trastornos en el esqueleto de los animales en crecimiento y, en algunos casos, las proteínas de la leche son uno de los alergenos alimentarios más importantes.
- La leche nunca debe sustituir al agua: los gatos, además de una dieta sana y equilibrada, siempre deben tener a mano un recipiente con agua limpia.
- Como a los gatos no les desagrada el sabor de la leche, se les puede ofrecer una pequeña cantidad como premio muy de vez en cuando.
Alternativas a la leche de vaca
Numerosas casas comerciales ofrecen leche especial sin lactosa para gatos. Si, a pesar de todo, el propietario quiere ofrecer leche, siempre será mejor que recurra a uno de esos productos en lugar de la leche de vaca.
Por otro lado, como la tolerancia a la lactosa varía de forma individual (algunos gatos la toleran bastante bien, otros se ponen enfermos con un pequeño sorbo) conviene hacer una prueba con una pequeña cantidad de leche. Si el animal responde negativamente lo mejor es olvidarse del producto y ofrecer otro tipo de golosina como premio.