Cuando alguien decide dedicarse a la estética canina, lo primero que suele hacer es matricularse en un curso para seguir los estudios de peluquería y estética canina.
Si no se tiene antecedentes en la familia o amistades que estén relacionados con este mundo, es difícil decidir en qué escuela obtener estos estudios, ya que esta profesión no presenta formación reglada en España, y la oferta en el mercado es muy amplia. Desafortunadamente, esto ha hecho que durante muchos años la oferta en cursos haya sido deficiente, cobrando gran cantidad de dinero sin ofrecer unas buenas bases de peluquería, con unas prácticas casi inexistentes o de baja calidad.
Mi consejo es dirigirse a centros de estética canina que se han especializado en la docencia o bien a empresas que se dedican íntegramente a la estética canina; para ambas alternativas, es importante exigir la programación del curso. Es igual si todo el curso es presencial o semipresencial (teórico a distancia y las prácticas presenciales); lo importante es que se pueda firmar un contrato en el cual se especifique cada una de las partes que la escuela se compromete a enseñar.
Un peluquero canino necesita de manera periódica asistir a distintos tipos de seminarios, charlas, cursos de reciclaje, exhibiciones y todos los eventos que le sirvan para estar siempre en constante aprendizaje e ir evolucionando su estilo.
Se ha de tener en cuenta que cuantas más horas tenga el curso en modo presencial, más costosos serán los estudios. Pero con la tecnología que nos rodea en la actualidad, estudiar desde casa y practicar una vez se ha adquirido un volumen suficiente de conocimientos de este oficio puede ser una alternativa más económica que ofrece la misma calidad que haciéndolo todo presencial. Como es lógico, los cursos que son íntegramente presenciales pueden ofrecer sin ningún problema una enseñanza de calidad, claro está; pero no debe olvidarse que precisarán muchas horas para alcanzar unos estudios completos, y las horas de trabajo de hoy en día son muy costosas. Así que al fin y al cabo serán el criterio de cada cual y su manera de querer recibir sus estudios los que harán que se tome la decisión más adecuada.
A partir de aquí, lo importante es aprender todo lo necesario para realizar peluquerías correctas: la base de los trabajos de peluquería canina, técnicas de trabajo, trimmings para cada tipo de pelaje y raza, elementos de la peluquería, interacción con el animal, etc.
Pero realizando solo un curso, sea cuál sea, seguramente no será suficiente para el resto de su trayectoria profesional. Un peluquero canino necesita de manera periódica asistir a distintos tipos de seminarios, charlas, cursos de reciclaje, exhibiciones y todos los eventos que le sirvan para estar siempre en constante aprendizaje e ir evolucionando su estilo.
Extraído de: Lidia Guerrero Martín. En constante evolución. Especies.