En las unidades de cuidados intensivos la flebitis es la complicación que ocurre más frecuentemente y la rotura de la vía en cuidados intermedios, según un reciente estudio.
La administración intravenosa (IV) de medicamentos y fluidos es un componente crucial del tratamiento en perros y gatos hospitalizados. Para proporcionar estos tratamientos, los pacientes deben tener colocado un catéter intravenoso (IVC) permeable. Aunque desempeñan un papel muy importante en el tratamiento de pacientes hospitalizados, pueden ocurrir complicaciones como extravasación, desprendimiento, flebitis y obstrucción.
En un estudio reciente llevado a cabo en la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Colorado (EE.UU.) han hecho una revisión observacional prospectiva sobre la incidencia y el tipo de complicaciones del IVC periférico en perros hospitalizados.
Se incluyeron 396 perros en el estudio desde noviembre de 2020 hasta marzo de 2021, incluidos 240 hospitalizados en la unidad de cuidados intensivos y 156 hospitalizados en la unidad de cuidados intermedios.
Flebitis y rotura de la vía, las complicaciones más frecuentes
Las complicaciones encontradas se clasificaron como extravasación, flebitis, desprendimiento, obstrucción y rotura de la vía. Si había flebitis, se utilizó la escala visual de evaluación de la flebitis para asignar un grado (0 a 5). Se utilizó la prueba exacta de Fisher para comparar el tipo de complicaciones entre la unidad de cuidados intensivos y la unidad de cuidados intermedios, un modelo logístico univariante para comparar la incidencia de complicaciones entre ambas unidades y se utilizaron razones de probabilidad ajustadas para comparar los grupos.
La incidencia de complicaciones del IVC periférico fue del 24,2 % en la unidad de cuidados intensivos y del 13,1 % en la unidad de cuidados intermedios, con una incidencia global del 19,9 %. La flebitis fue la complicación más común la unidad de cuidados intensivos y la rotura de la vía en la unidad de cuidados intermedios. La duración de la hospitalización y el peso del paciente tuvieron un efecto significativo sobre la probabilidad de sufrir complicaciones. Curiosamente, la incidencia de complicaciones en perros y gatos es mucho menor que la documentada en humanos.
Consecuencias
Las complicaciones de los IVC periféricos son comunes en los perros hospitalizados y pueden dar lugar a un aumento del gasto para los propietarios, la falta de administración de los tratamientos prescritos, el agotamiento venoso (falta de vasos periféricos para la colocación del IVC) y dolor experimentado por el paciente.
Es fundamental que los perros tengan un acceso intravenoso adecuado, especialmente en la unidad de cuidados intensivos, ya que estos pacientes suelen estar inestables y pueden experimentar un rápido deterioro del estado de salud. Este estudio documenta un problema que debe estudiarse en profundidad, ya que casi una cuarta parte de los pacientes hospitalizados en la unidad de cuidados intensivos corren el riesgo de tener un acceso intravenoso comprometido.
Simpson, S.E. and Zersen, K.M. (2022), Incidence and type of peripheral intravenous catheter complications documented in hospitalised dogs. J Small Anim Pract. https://doi.org/10.1111/jsap.13574