Fundación Affinity, junto con otras entidades, impulsó en 2017 diferentes iniciativas para instar a las fuerzas políticas a acometer esta reforma.
Por fin los animales tendrán los mismos derechos en España que en algunos de los países europeos de nuestro entorno. El Congreso ha aprobado la Proposición de Ley de modificación del Código Civil para que los animales dejen de ser considerados cosas y les otorga el estatus de “seres dotados de sensibilidad”.
Junto a esta ley también se da luz verde a la modificación de la Ley Hipotecaria, para excluir a los animales de compañía de ser parte de una hipoteca, y la Ley de Enjuiciamiento Civil, que los declarará “inembargables”, por ejemplo, en casos de desahucio.
En España, la Fundación Affinity, junto con otras entidades, impulsó en 2017 diferentes iniciativas para instar a las fuerzas políticas a acometer esta reforma. Esta labor dio sus frutos y en diciembre de ese mismo año el Congreso admitió a trámite, con apoyo unánime de todos los grupos parlamentarios, una proposición de ley para cambiar el régimen jurídico de los animales. Sin embargo, no fue hasta abril de 2021 cuando la Cámara Baja dio luz verde a tramitar el texto legal, que finalmente fue aprobado por la Comisión de Justicia el pasado 5 de octubre. Unas semanas después, el 17 de noviembre, el Senado debatió y votó el texto, que fue aprobado y que ahora ha sido ratificado por el Congreso.
“Sin duda, con el nuevo reconocimiento jurídico en el Código Civil, España ha dado un paso esencial y muy importante en la defensa de los animales. A partir de este momento su bienestar cobra importancia por encima de otras cuestiones. Como sociedad, proteger a nuestros perros, gatos y demás animales es una obligación y es el deseo de la mayoría que la ley esté de su parte. Hoy es momento de celebrar, pero con la mirada puesta en seguir avanzando en pro de los derechos de los animales”, explica Isabel Buil, directora de la Fundación Affinity.
“Lo que hace esta ley es reconocer legalmente algo que la ciencia ha demostrado: que los animales son seres vivos dotados de sensibilidad. Y esto jurídicamente es muy importante, porque permite vertebrar el trato que el derecho les da y por tanto, poder proporcionar a los jueces aquellas herramientas que necesitan para poder decidir y dictaminar teniendo en cuenta su condición de ser vivo. Tenemos que estar orgullosos del gran paso que estamos dando como sociedad, porque esto no se va a quedar aquí: con esta ley abrimos la puerta a grandes cambios futuros que van a venir dados por esta nueva condición”, afirma Marita Giménez-Candela, Catedrática y directora del máster de Derecho Animal y del ICALP de la Universidad Autónoma de Barcelona.