A medida que nuestros fieles compañeros envejecen, sus cuerpos experimentan una serie de cambios fisiológicos que pueden afectar su calidad de vida. Entre estos cambios, las patologías del sistema nervioso en perros geriátricos son de particular preocupación, ya que pueden manifestarse de diversas formas y tener un impacto significativo en su bienestar.
Déficit cognitivo
Igual que en las personas, los animales mayores desarrollan un déficit cognitivo o demencia. Es lo que en veterinaria conocemos como síndrome de disfunción cognitiva y no es otra cosa que el envejecimiento progresivo de nuestros perros y gatos.
Los propietarios son un elemento crucial en la identificación de síntomas o signos que puedan observar y posteriormente transmitir en consulta en sus visitas al veterinario de tal forma que se inicien las recomendaciones o tratamientos adecuados.
Algunos signos
- marcha deambulante
- vocalizaciones
- comportamientos compulsivos con posible desarrollo de estereotipias
- dificultad para caminar
- largos periodos de somnolencia
Causas
Este déficit se produce principalmente por la hipoxia propia de los cambios vasculares normales que se producen en el cerebro, el envejecimiento mitocondrial que permite que se acumulen más radicales libres que provocan lesiones celulares, desequilibrios en la recaptación de neurotransmisores o depósitos que favorezcan la hiperfosforilación de la proteína TAU (presente también en personas con Alzheimer).
Tratamiento
Lo que podemos hacer para retrasar sus efectos es paliarlos con medicación como vasodilatadores, inhibidores de recaptación de la serotonina, fármacos como el adrafinilino que interviene en los ciclos de sueño-vigilia, nutracéuticos y una mejora de la alimentación.
Previamente es importante informar a sus tutores para que sean plenamente conscientes de los cambios, principalmente comportamentales, a los que estarán sometidos sus animales y que son daños irreversibles que evolucionarán hacia un pronóstico de más a menos favorable con el paso del tiempo.
Síndrome vestibular geriátrico
Otra enfermedad frecuente es el conocido como síndrome vestibular geriátrico y que vamos a ser capaces de identificar rápidamente por los signos clínicos que lo acompañan muy característicos, pero nunca con pérdida de consciencia.
Signos
- Head tilt o ladeo de cabeza
- Nistagmo
- Estrabismo posicional
- Incoordinación o ataxia vestibular
El sistema vestibular es el responsable del equilibrio, la coordinación postural y el movimiento de la cabeza, de ahí que se justifiquen los signos clínicos anteriores. Se produce de forma idiopática en perros mayores y no está descrita en perros jóvenes por lo que en estos últimos habría que sospechar de otro tipo de afectaciones o que sean secundarias a otras patologías metabólicas, infecciosas o inflamatorias, por traumatismos o por neoplasias cerebrales centrales.
Suelen ser procesos que remiten de forma espontánea inclusive a veces sin medicación, pero que tiene un alto porcentaje de repetición por lo que debemos informar correctamente a los propietarios.
El tratamiento principal
Se basa en la administración de antieméticos como el maropitant (2-8 mg/kg/24 h) a altas concentraciones para mejorar el estado clínico del paciente. No son procesos dolorosos, pero en ocasiones vamos a necesitar utilizar ansiolíticos o relajantes musculares debido al pedaleo característico de estos animales al intentar levantarse (alprazolam o diazepam).
Se desaconseja el uso de antiinflamatorios por posibles complicaciones por osteomielitis infecciosas en el que el veterinario puede recomendar el uso combinado de corticoesteroides y antibióticos de amplio espectro. Por este motivo, el diagnóstico debe acompañarse siempre de radiografías craneales y examen otoscópico para valorar la integridad de las bullas timpánicas.
Extrido de Débora Ateuves 107, Principales patologías en pacientes geriátricos de Débora de Benito Santamaría. ATV en H. Veterinarea IVC Evidensia.