Antes de adoptar a un reptil como mascota hay que informarse bien, ya que un mal manejo puede derivar en patologías importantes.
Es muy común que los reptiles que llegan a la consulta presenten problemas de salud derivados de una mala nutrición, ya que algunos de ellos son alimentados con dietas caseras o con dietas comerciales de baja calidad que no contienen los requerimientos nutricionales básicos de la especie en cuestión. Por esto es recomendable mantener siempre una dieta bien equilibrada e incluso, de ser necesario, suplementarla de manera adecuada con minerales.
- Enfermedades más comunes
- • Hipotermia crónica
• Heridas por sobrepoblación o por mal manejo del hábitat
• Abscesos
• Hipovitaminosis A
• Hipovitaminosis D
• Hipovitaminosis B o deficiencia de tiamina
• Hipoparatiroidismo nutricional secundario
• Estomatitis ulcerativa
• Neumonías
• Septicemia
• Fracturas (incluyendo las de caparazón)
• Prolapso cloacal
• Osteoperiostitis en serpientes
• Parasitosis
• Pancreatitis
• Hepatitis, etc.
Algunos de los signos más comúnmente detectados en reptiles y que pueden ser indicio de un problema de salud grave son: hipotermia, hipertermia, anorexia, pérdida de peso, depresión, falta de movimiento, deshidratación, atrofia muscular, edema, ecdisis, diarreas, estreñimiento, vómitos, estornudos, sobrecrecimiento de garras, disnea, dermatitis, estomatitis (incluso en ocasiones sangrado de encías y boca), descarga nasal, caparazón blando, presencia de ectoparásitos, etc.
Pruebas diagnósticas
Siempre es recomendable realizar estudios de laboratorio como hemograma (biometría hemática), química sanguínea, citologías, estudios de histopatología, cultivos, estudios radiográficos, ultrasonido, etc. Recordemos que estos son métodos que nos ayudarán a acercarnos al diagnóstico y, por consiguiente, al tratamiento oportuno del paciente.
Es muy importante mencionar que antes de utilizar o prescribir cualquier tipo de medicamento, sin importar la vía de administración, es necesario revisar la tabla de dosificaciones adecuada para esa especie, ya que existe un gran riesgo de causar una intoxicación.
Precauciones durante la hospitalización
En caso de ser necesario monitorizar a alguna de estas mascotas en el hospital o clínica veterinaria para algún procedimiento o manejo, se deben tener las siguientes consideraciones:
- Mantener al paciente aislado de los demás, evitando ruidos, luces brillantes, etc.
- Mantener condiciones adecuadas de temperatura, humedad y luz para brindar confort al paciente.
- Siempre permitir el acceso a una fuente de agua (solo en casos muy específicos se puede restringir).
- El acceso a su hábitat provisional y su manejo debe llevarse a cabo únicamente por personal cualificado.
Recomendaciones para el propietario
Los reptiles en edad adulta son animales poco sociables y habitualmente deben mantenerse aislados de cualquier otro animal, sin importar la especie de la que se trate.
Es trascendental recordar a los propietarios de este tipo de mascotas que no es adecuado utilizar medicaciones sin una evaluación previa de un médico veterinario especializado en fauna silvestre. Además, es también necesario concienciar al propietario sobre los riesgos que puede acarrear a la salud pública el manejo y posesión de especies no permitidas, según las leyes de cada país (ya sea por estar en peligro de extinción o por tratarse de especies exóticas). Por último y no por eso menos importante, es necesario recordar al propietario que debe seguir las indicaciones del médico veterinario al pie de la letra para mantener la buena salud de su mascota.
Extraído de Daniel Hernández Pérez Tagle Jose Daniel Alvizua Rosado Manejo de reptiles en las clínicas veterinarias, Ateuves nº 45, págs. 28-33.
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