La correcta identificación y tratamiento de las pulgas contribuye a mejorar la calidad de vida de perros y gatos.
Las mascotas además de estar expuestas a las molestias y al desazón que provocan los parásitos externos per se, pueden padecer enfermedades transmitidas por estos e incluso actuar como vehículos de enfermedades epizoóticas. Por eso es tan importante su prevención y en caso necesario, tratamiento. Uno de los parásitos más habituales es la pulga.
Pulgas, pequeñas y matonas
Las pulgas son pequeños artrópodos de 1 a 3 milímetros de longitud, aplanados lateralmente y de un color rojizo o marrón oscuro. Las especies más abundantes son Ctenocephalides felis, Ctenocephalides canis, Pulex irritans y Echidnofaga gallinacea.
Su ciclo vital se desarrolla por completo sobre el cuerpo de su hospedador, abandonándolo únicamente en forma de huevos puestos por las hembras. Los huevos caen del hospedador al suelo, donde se desarrolla la pupa elaborando un capullo a su alrededor hecho de detritos para emerger como adulto listo para saltar sobre un nuevo hospedador.
Para eliminar las pulgas procuraremos tanto la eliminación de las pulgas sobre el animal como de las fases en desarrollo en el ambiente y en otros animales o personas con las que conviva.
Por todo lo anterior, las pulgas de los animales con acceso a una morada confortable en el interior de un hogar disponen de las condiciones idóneas en cualquier época del año para desarrollar su ciclo vital. Provocan picaduras sobre la piel del animal, son potenciales transmisoras de enfermedades como rickettsiosis y bartonellosis, y, en algunos animales, pueden provocar problemas alérgicos, como la dermatitis alérgica por picadura de pulgas (DAPP).
Cómo luchar contra las pulgas
El tratamiento y la prevención de las pulgas implican una lucha global contra todas las fases de la pulga. Para ello procuraremos tanto la eliminación de las pulgas sobre el animal como de las fases en desarrollo en el ambiente que le rodea y en otros animales o personas con las que conviva.
Para la prevención de las pulgas disponemos de moléculas en formulación spot-on (pipetas de aplicación sobre la epidermis), aerosoles y baños.
Pulgas bajo control
Para el tratamiento de las pulgas sobre el animal…
Podemos utilizar en primer término un peine para pulgas, así como baños con champús pulguicidas o con insecticidas asociados. Disponemos de varias opciones terapéuticas comerciales en forma de comprimidos orales o formulaciones spot-on (nintepiram, piretrinas, fipronilo, imidacloprid, lufenurón, piriproxifeno, milbemicina, selamectina) capaces de eliminar las pulgas instantáneamente o incluso de mantener su efecto durante semanas, previniendo las reinfestaciones.
Muestran una buena eficacia y en algunos casos, como la selamectina, son capaces de transferirse al medio ambiente junto con las descamaciones y detritos de la piel, lo cual evita el desarrollo de larvas y huevos. La elección del compuesto dependerá del animal y del tipo de vida que lleve.
Debemos eliminar la carga parasitaria en el ambiente tanto como nos sea posible…
Esto implica la limpieza de la materia orgánica, polvo o tierra con la que pueda entrar en contacto el animal mediante aspirado y/o lavado del medio donde vive, aplicación de un tratamiento insecticida y desinfección de los tejidos y juguetes de la mascota. En caso de infestación, todos los animales que entren en contacto con la mascota deben ser tratados.
Extraído de José Miguel Marcén, Parásitos externos, un peligro real, Ateuves 43, pág. 24-30.