El sindicato de auxiliares responde ante el caso de la ATV investigada por ejercer como veterinaria

Ante este titular asoma la sombra de una situación tan recurrente en España, la extralimitación de funciones por parte de los ACVs.

Sobra decir que esto jamás debe producirse, un ACV tiene sus funciones las cuales nunca deben sobrepasarse. Por ejemplo, por mucho hincapié que se haga, un ACV no debe hacer radiografías sin la titulación necesaria, un ACV no puede hacer ecografías dado que para eso se necesita ser veterinario debido a su carácter diagnóstico, un ACV no puede realizar procedimientos quirúrgicos, pero sí ayudar en los mismos, al igual que un ACV no puede quedarse solo en una clínica veterinaria que permanezca abierta de cara al público porque el veterinario tenga que ausentarse buena parte de la jornada laboral. Si sois ACVs negaos a hacer dichas cosas, os las pedirán sin duda, no obstante negaos, porque no pasará nunca nada hasta que algo salga mal; ahí es cuando os señalarán.

Ahora bien, entramos en el terreno donde vienen curvas. Si esta noticia ha salido a la luz es, únicamente, porque el paciente ha fallecido durante la cirugía y se ha señalado a la ACV como responsable directa. Si hubiese salido todo correctamente nada habría pasado. Por lo que, ¿es culpa total de la ACV? No. La noticia hace referencia principalmente a ella y, solamente al final del todo habla de los veterinarios. Pues bien, fueron los veterinarios quienes le dieron permiso o más bien le instigaron a hacer dichas extralimitaciones en sus tareas. Por supuesto, eso no le quita ni un ápice de culpa al auxiliar por haber accedido a ello, pero la culpa es compartida sin lugar a dudas.

Durante mucho tiempo se le lleva exigiendo a los ACVs la realización de todos los procedimientos anteriormente citados, y de muchos otros que no competen al auxiliar. Sin embargo, siempre será más fácil culpar a quien no tiene una educación reglada que a quien sí la tiene ¿verdad?

Es la doble cara de una profesión en la que la hipocresía y el cinismo llega a reinar.

Como aclaración, esto no es una generalización global del 100% de centros veterinarios, sin embargo, con que pase en un 1% de los mismos, ya es un problema común.

Desde el SACV os instamos a que os neguéis a extralimitaros en vuestras funciones por mucho que se os diga u os amenacen. Tenemos derechos y hay que saber usarlos.”

 

En las últimas horas, debido al debate generado, el SACV ha querido aclarar varios puntos:

• 1. El principal objetivo con el que nace este Sindicato es el de conseguir la homologación de los ACV como estudios reglados y oficiales. Y, con ello, conseguir así establecer las funciones que los ACV deben cumplir. Que en ningún caso será diagnosticar, operar,o realizar procedimientos sin la titulación correspondiente, pero tampoco será ser recepcionistas (eso es un trabajo diferente).
• 2. Seguido de este primer punto, promover una buena enseñanza de calidad que amplíe notoriamente los conocimientos para ampliar así las funciones de los ACV en el futuro. Transformando así la imagen de un auxiliar en lo que realmente debe ser, un enfermero veterinario.
• 3. Luchamos y lucharemos siempre por la totalidad del sector en el ámbito nacional. Pero siempre desde la legalidad, no podemos pretender correr sin haber gateado al nacer.
• 4. Jamás estaremos en contra de los veterinarios como conjunto, son nuestros compañeros de profesión, y somos una simbiosis necesaria para el buen hacer de una clínica. Engranajes de un reloj que necesitan estar compenetrados. Pero sí denunciaremos las situaciones totalmente ilegales e injustas.
• 5. Mediaremos activa y pasivamente para que las injusticias dejen de producirse en los lugares donde las haya. ¿Significa que pasa en todos sitios? No, pero sí pasa en demasiados como para ser algo de lo que apartar la vista. El SACV nace por y para los ACV. Nos queda mucho camino por andar, pero los grandes hitos llevaron tiempo.