Al igual que los humanos, los perros y los gatos son susceptibles de sufrir urgencias médicas que derivan en una visita obligada el hospital más cercano. De hecho, estar alerta a posibles síntomas y circunstancias que requieran de la intervención urgente por parte de un especialista es decisivo para salvar la vida del animal. Por ello, el Hospital Veterinario Madrid Centro, perteneciente al Grupo Iskaypet, ha elaborado una lista de los motivos más frecuentes por los que se debe acudir a urgencias con nuestros animales de compañía.
Ana Ramírez, experta veterinaria del Hospital Veterinario Madrid Centro, explica que, “la primera recomendación antes de tomar la decisión de si se debe ir o no al hospital veterinario es mantener la calma. No obstante, el tiempo es decisivo, y si la gravedad de la situación lo requiere se debe acudir inmediatamente, pues un retraso de horas o minutos puede significar la diferencia en la supervivencia del animal”. Las consultas de urgencias más comunes suelen ser diversas; desde vómitos y diarreas excesivas hasta atropellos, colapsos y mordeduras, entre otros.
Vómitos o diarreas
Vómitos o diarreas excesivas suelen ser las principales causas por las que se acude a las urgencias veterinarias. Normalmente se trata de perros o gatos que han ingerido o han estado expuestos a alguna sustancia indebida y se han intoxicado.
Para estos casos se suelen usar las ecografías como forma de diagnóstico complementario. En cuanto al tratamiento de estas urgencias digestivas, si es posible se induce el vómito del animal para que expulse las sustancias nocivas ingeridas. Tras ello, los animales suelen requerir observación minuciosa, pudiendo quedar ingresados en el Hospital de forma preventiva.
Problemas respiratorios y urinarios
Los colapsos, dificultades respiratorias o dificultades para orinar suelen ser motivo también de consulta en las urgencias. Normalmente requieren de la toma de distintas muestras y análisis de sangre y orina para poder detectar posibles enfermedades que estén provocando estos síntomas, infecciones o fallos puntuales.
Accidentes
Los ingresos circunstanciales -como la mordedura de otro perro o los atropellos- también son motivos comunes por los que se acude a urgencias. En el primer caso es necesario estudiar la gravedad de las heridas y descartar la transmisión de enfermedades por la mordedura; en el segundo caso, los atropellos pueden causar lesiones internas y/o externas muy graves. Habría que someter al animal a distintos tipos de análisis, radiografías, ecografías, etcétera, para diagnosticar el impacto de lo sucedido y su posible tratamiento.
Las caídas, muy frecuentes, también hacen parte de esos ingresos por accidente. Aunque el animal aparentemente parezca estar bien tras el golpe, es recomendable siempre llevarlo a urgencias para asegurar que no hay lesiones internas de gravedad.
En el caso de los gatos, por ejemplo, el ‘síndrome del gato paracaidista’ suele ocurrir con cierta frecuencia. Cuando los gatos caen de alturas considerables se debe normalmente a que se resbalan del alféizar de la ventana o por estar tratando de cazar algún animal. Es muy importante que en un hogar con gatos todas las ventanas estén correctamente protegidas. Las caídas desde alturas considerables pueden provocarles lesiones graves, desde fracturas hasta lesiones en órganos internos. Es de suma importancia llevarlos a urgencias lo antes posible para que sean estabilizados y se pueda llevar a cabo el tratamiento adecuado.
Urgencias veterinarias en hospitales de referencia
En todo caso, la recomendación general es siempre tener identificados con anticipación los centros veterinarios que cuenten con urgencias de la zona donde vive el animal, “lo ideal es acudir a las urgencias veterinarias en hospitales de referencia, especializados y que cuenten con toda la aparatología para el diagnóstico y tratamiento acertado de los animales de compañía”, concluye Ramírez.
